El teletrabajo es una forma de trabajo a distancia en la que los empleados realizan sus tareas desde un lugar diferente a la oficina de la empresa, utilizando tecnologías de la información y comunicaciones (TIC) cómo la telecomunicación. Se originó en los Estados Unidos en la década de 1970, durante la crisis del petróleo. El mismo puede tener consecuencias tanto físicas como psicosociales;
- Físicas:
- El teletrabajo puede causar sedentarismo, trastornos musculoesqueléticos, fatiga visual y problemas cardiovasculares. Pasar muchas horas sentado en la misma postura, sin compañeros de trabajo cerca, y la calidad del puesto de trabajo las sillas, mesas y computadoras) pueden ser perjudiciales para la salud.
- – Psicosociales:
El teletrabajo puede causar tecnoestrés (fatiga informática), ciberacoso, aislamiento laboral, estrés, ansiedad, soledad y malestar emocional. La falta de interacción social directa, la ausencia de límites entre la vida personal y laboral, y la dificultad para desconectarse pueden aumentar los niveles de estrés y ansiedad. Además, el teletrabajo puede dificultar la organización, el trabajo en equipo y la promoción.
Lo citado puede tener un impacto negativo en la salud mental de los trabajadores, aumentando el estrés, la ansiedad y la depresión.Cómo la mutación en la forma de pensar acerca de los tiempos establecidos por nuestros empleos. Ahora la Generación Z cree que llegar 10 minutos tarde es tan válido como estar a tiempo. La culpa no la tienen ellos, todo es culpa del teletrabajo.
Nuevos modos de trabajar
Puede recordar que no solo en Paraguay sino el mundo entero ha estado teletrabajando hace poco, durante la pandemia. No íbamos a la oficina, ocupamos nuestro escritorio y frente a nuestros ordenadores redacatabamos, diseñamos o ideabamos lo que el empleo nos demandaba para el cliente, lector, paciente o persona que busque respuestas de nuestra empresa.
Lo hacíamos por seguridad y cuidado no de nuestras propiedades particulares en nuestros trabajos sino lo más importante siempre; nuestra salud. Lejos de quedarse en la anécdota de la puntualidad, lo cierto es que les pasa exactamente lo mismo a la hora de entregar encargos.
Si bien el 40% de los Millennials serían capaces de perdonar a un compañero por llegar 10 minutos tarde, la cifra cae hasta el 26% en el caso de la Generación X y hasta el 20% en los Baby Boomers. El 70% de los Boomers, en cambio, reconoce tener una tolerancia cero respecto a la falta de puntualidad. Por el régimen en su vida laboral, académica y social.
Llegar tarde a una cita o compromiso es visto cómo una falta de respeto porque es una actitud que significa no dar importancia al compromiso o a la persona con quien suponga la responsabilidad. Algunas de las derivaciones que surgen del llamado teletrabajo que implica mudar viejos hábitos laborales que han cambiado.
